Me imagino en tu mente, reflejada en tus ojos.
Me veo minúscula, imbécil, inmadura, insignificante.
Me siento estúpida, desconocida, evaluada.
Soy altanera, soy idiota.
Y después soy todo lo contrario, o no soy nada.
Te das cuenta de que soy un arañazo en una almohada.
Que soy Mercurio y también soy Marte,
que de Venus no tengo ni la fachada.
Que en verano soy la Luna
y en invierno ardo en llamas.
Y luego solo queda ceniza.
jueves, 16 de junio de 2016
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Lo más leído
-
- Dile a tu madre que nunca he estado más enamorado de nadie en mi vida. ... - Os quiero a las dos igual.
-
Soy de esas personas que tapan los recuerdos porque no son capaces de borrarlos y, más aún, de quitarles valor. Hay personas que se tergive...
-
Lourdes llevaba ya como quince hijos en su haber y a estas alturas de la película no le importaba para nada experimentar. Así que allí esta...
-
Madrid es una ciudad que suelo asociar con dolor de corazón. Porque te fuiste a Madrid para no regresar, porque cada viaje que hacías de vu...
-
Te huelo en mi sudor más repugnante, como una especie de metáfora real. Ya sólo siento sábanas rojas y verano desnudo. Solo escucho turistas...
-
Siempre estaré atrapada en los futuros que no fueron, como si mi cerebro creyera de verdad que la vida se puede rebobinar. Como si la energ...
-
Se deformaba, ¿te das cuenta? Un año gritó a las huellas del odio y al siguiente babeaba piedad. Se deformaba el deber, se fusionaban el...
-
Tengo prisa, pero la medida del año me afecta especialmente hoy. Afecta a mi subconsciente, que no para de preguntarme si estarás perdido, s...
-
"Nadie salvo yo apuesta por que lo haré"
-
Tanto caminar hacia el agujero en la pared que estabas horadando... Ahora no te pongas delante. Déjame pasar.

0 regalitos:
Publicar un comentario