lunes, 29 de marzo de 2010

No hay nada que hacer

Me despierto por la mañana
y parece que fue ayer
pasarán días, semanas, meses
y yo lo recordaré sin saber
si tu promesa se romperá.

Otros lo prometieron
y mi sonrisa se dibujó
inocente e ilusionada
de tu ilusión se borró.

Todas se rompen, es inútil
sincero o mentiroso lo harás
seré un vago recuerdo
Porque el tiempo pasa, desaparezco
y no hay nada que hacer.

1 regalitos:

Esteban Iacomelli dijo...

Promesas y tiempo. No pueden convivir.

Publicar un comentario

Lo más leído