lunes, 7 de septiembre de 2009

Cómo abandonar a tu enamorado

Ya está, es inevitable, amor.

Que no, animalito mio, que ya no te quiero. Que me aburres y me agobias. ¡Que no ladres!

No me persigas, ni si quiera intentes fingir que no te intereso, hazlo de verdad.

La criatura soberbia perdura en mi recuerdo y borra el tuyo. Es tan exhuberante...

Lo sé, no hace falta que me lo digas. Que tu eres más fiel, que no me abandonas. ¡Ai! Perrito faldero


Pero, ¿qué hago si no te quiero? ¿Quieres que te mienta.. es eso?

¿Quieres que acaricie tu basta piel pensando en la suya tan suave?, ¿que juegue contigo mientras me divierto soñando en la criatura... tan distante, inalcanzable?


Y es que así es, ahora me siento presa yo; tan débil, vulnerable.

Ahora soy tú pequeño mío, ahora soy yo la que majestuosamente se arrastra por la gravilla hasta sus pies.


0 regalitos:

Publicar un comentario

Lo más leído