Animalito mío, ¿cómo puedes ser tan confiado? Sucumbes bajo mis caricias en tu extenso cuerpo, como si mis manos estuvieran imantadas a él, sin temer.
Creía habértelo dejado claro la última vez, jamás podrás dominarme. Ayer, mientras salías a dar tu paseo matinal, encontré una criatura mucho más pequeña que tú en tamaño, pero más bella en apariencia. Y aunque tu serás siempre mi mascota, decidí divertirme con aquel curioso gato pardo.
Como desconocía aún su manera de actuar, me aproximé con cautela, a pequeños pasos, hasta que comenzó a acercarse con identica curiosidad. Entonces me llevó a su enorme madriguera y estuve jugueteando con el animal, fue realmente divertido.
Luego, exhaustos, yacimos en el suelo unos segundos, pero súbitamente subió a mi pecho para ser acariciado. Y al apreciar su piel suave y resplandeciente lo hice sin pensarlo al tiempo que mi vello se erizaba de placer.
Terminado el ritual saltó de mi regazo, y me miró con ojillos vívidos y tiernos, pidiendo que no lo dejase allí. Pero lo hice, no te puedo abandonar, te quiero.
No se preocupó demasiado, volvió su cabeza atrás algunas veces y después desapareció para siempre.
Ahora vuelves de tu paseo y te acurrucas junto a mí. Todo continúa como antes.
martes, 4 de agosto de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Lo más leído
-
Porque me dices por qué, Dos palabras.
-
Es triste navegar en el mar de ceniza de tus recuerdos, donde no hay casi fotos, porque vivimos juntos una transición digital y revoluciona...
-
Ayer me preguntaron por ti, como si estuviéramos en tu casa. Y dije que no sabía nada, no quise dar más detalles. Por dentro pensé "a...
-
Siempre estaré atrapada en los futuros que no fueron, como si mi cerebro creyera de verdad que la vida se puede rebobinar. Como si la energ...
-
Me pregunto si piensas en mí mientras recorro las calles de una ciudad extraña. Actúo, actuaba, como si presenciaras cada paso, cada raya q...
-
Bolitas rojas que vienen a mi recuerdo oxidado, esa memoria que surge inesperadamente, como algo nuevo que jamás has vivido. En un tarde noc...
-
Escribir las caricias como si fueran un dictado del colegio, con puntos seguidos, puntos aparte, punto final. Reescribirlas en casa, porqu...
-
Ayer estaba en la playa, una playa atestada de personas y pelotas hinchables. Entonces una gigantesca ola hizo subir la marea unos 5 metros....
-
Tengo derecho a atesorar los momentos antiguos, a revivirlos sin pena. Mi alma le sonríe a tu recuerdo, tan inexistente como tu amor por mí....
-
He sabido que nuestro penúltimo beso salió ardiendo con los pinos de Doñana. Ese beso que en realidad fue el último, porque el último fue ...
0 regalitos:
Publicar un comentario