Mi amigo tiene un dios
que me da lecciones de vida.
Sus actos, casualidades, no importa,
para mí son ironías.
Lo importante: lo que se espera.
En cada error reflejado
sé que soy más sincera.
En cada fallo menos autómata,
más exigente, menos controladora,
más visceral, más persona.
miércoles, 30 de mayo de 2012
lunes, 28 de mayo de 2012
Enfermas Carcajadas
Distanciarme lo máximo posible de mí misma.
Ignorar lo gris, ignorar la importancia, esconderse en la alegría andaluza.
Provocar, ser ruin, traicionarme, escupir lágrimas.
No me importa, no quiero saber,
herir, sonreír, esconderme.
Ser corroborada
tras una despedida egoísta.
Llorar, cada vez menos,
comer algodón de azúcar,
caminar, dormir,
volver a empezar.
Dos días, solo dos días olvidando un presente paralelo.
Distanciamiento físico
dos trenes que se marchan.
Sí, como si nada hubiera pasado.
Ignorar lo gris, ignorar la importancia, esconderse en la alegría andaluza.
Provocar, ser ruin, traicionarme, escupir lágrimas.
No me importa, no quiero saber,
herir, sonreír, esconderme.
Ser corroborada
tras una despedida egoísta.
Llorar, cada vez menos,
comer algodón de azúcar,
caminar, dormir,
volver a empezar.
Dos días, solo dos días olvidando un presente paralelo.
Distanciamiento físico
dos trenes que se marchan.
Sí, como si nada hubiera pasado.
Pensado (o soñado) por
María
a
lunes, mayo 28, 2012
viernes, 25 de mayo de 2012
De regreso, como siempre
Existencia subjetivamente miserable
cada mes, durante minutos,
como arañas en mi cerebro.
Subjetivamente improductiva
objetivamente irreprochable
otra vez de regreso a casa.
Miserable por no saber ignorar
la psiquis mundana
de muchos que me aman.
Improductiva, estancada.
Las emociones están muriendo,
enviudando en jardines primaverales.
Quien me conoce no me ha buscado
porque no ha pagado la entrada
de mi función, pensaba.
Todos pagan, todos
son correctos y yo
solo puedo entrever gusanos.
Odio sentirme superior
ante la pena que provoca
vuestro afán de superioridad.
En el autobús,
en tren, en coche,
al final quiero ser ceniza.
cada mes, durante minutos,
como arañas en mi cerebro.
Subjetivamente improductiva
objetivamente irreprochable
otra vez de regreso a casa.
Miserable por no saber ignorar
la psiquis mundana
de muchos que me aman.
Improductiva, estancada.
Las emociones están muriendo,
enviudando en jardines primaverales.
Quien me conoce no me ha buscado
porque no ha pagado la entrada
de mi función, pensaba.
Todos pagan, todos
son correctos y yo
solo puedo entrever gusanos.
Odio sentirme superior
ante la pena que provoca
vuestro afán de superioridad.
En el autobús,
en tren, en coche,
al final quiero ser ceniza.
Pensado (o soñado) por
María
a
viernes, mayo 25, 2012
lunes, 14 de mayo de 2012
Tristeza
Siempre esta asquerosa sensación de abandono.
Pensado (o soñado) por
María
a
lunes, mayo 14, 2012
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)
Lo más leído
-
Me despierto por la mañana y parece que fue ayer pasarán días, semanas, meses y yo lo recordaré sin saber si tu promesa se romperá. Otros l...
-
De repente, aunque lo presintieras, ves volar el tesoro frágil de tus manos. Estás en un puente y lo observas alejarse flotando en el agua,...
-
Difiere de mí, tacha dos guiones. Pero con una intersección suficiente para compartir nuestras vidas. Con una unión adecuada para poder...
-
Hace mucho tiempo, yo cometí un gran error dejándole escapar. ¿Vas a cometer tú el mismo error dejándome escapar a mí?
-
Estás tan lejos de mi. Es la primera vez que tengo esa sensación de distanciamiento psicológico. Siempre, aunque lejano físicamente y lejan...
-
Iba a pedirte que me aclarases mis dudas, pero tuve miedo. Entonces quise escribirte que no quería saber nada, pero cerré la ventana. Y ahor...
-
Hella no era muy alta pero sabía mirar por encima del hombro a los demás. Solo vivía de noche, nunca recordaba los días. No era de ningún pa...
-
He creado un segundo aquí mismo, bajo tus pies, sobre la mesa para mis amigas. Se destruirá en el segundo siguiente o quizás, c...
-
Ya no queda nada, ni un resquicio de vía, ni un amago de saludo. Hoy di el último paso. Ya no podré saber nada más de ti. Por fin tuve el v...
-
Me cuesta mucho escribir en mis periodos de felicidad. Parece que solo la cuerda de la tristeza guía mi manos desde la cruceta de las emocio...
